El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y el Ejército aprovecharon este viernes la conmemoración del aniversario 110 de la Revolución Mexicana para revindicar su proyecto de la “cuarta transformación” de la vida pública del país.
“Hoy más que nunca estamos comprometidos con la transformación que está en marcha. Hoy más que nunca el Estado mexicano puede confiar en la lealtad institucional que durante más de un siglo han hecho patentes sus Fuerzas Armadas”, declaró Luis Cresencio Sandoval, jefe del Ejército mexicano.
El titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) participó en un homenaje en el Monumento a la Revolución en Ciudad de México junto al presidente y los representantes de los demás poderes.
En el evento, participaron 396 elementos de las Fuerzas Armadas, 11 jinetes charros, dos vehículos y 189 caballos, además de ciudadanos que dramatizaron la efemérides en la que Francisco I. Madero emprendió en 1910 una lucha para derrocar al dictador Porfirio Díaz.
Además de reiterar su lealtad al presidente, el jefe del Ejército defendió la creciente participación de militares en la construcción de obras emblemáticas de López Obrador, como el Tren Maya, el nuevo aeropuerto de Ciudad de México y la refinería Dos Bocas.
“Apoyamos los proyectos prioritarios de su gobierno con todos los recursos humanos, materiales y financieros que la nación nos provee en aras del bienestar de los mexicanos, nuestra lealtad institucional es a toda prueba”, sostuvo Sandoval.
ENTRE TRANSFORMACIONES
López Obrador considera la Revolución mexicana como la “tercera transformación” de México, tras la lucha de Independencia de 1810 y la Guerra de Reforma de 1857.
Antes del evento, el líder izquierdista dedicó su rueda de prensa de Palacio Nacional a recordar que la Revolución acabó con la vida de 1 millón de mexicanos por la violencia y enfermedades.
“Por eso nosotros vamos a seguir cuidando que esta cuarta transformación de la vida pública de México siga siendo de manera pacífica”, manifestó sobre su proyecto de Gobierno.
El presidente se congratuló de “ir consiguiendo este propósito de transformar a México sin violencia”.
También acusó a los conservadores de buscar la confrontación y añorar los años de la dictadura.
“Hay insensatos que dicen que estaba muy bien el régimen porfirista, los conservadores desde luego”, manifestó.
TRANSFORMACIÓN REAL
El historiador Carlos Illades coincidió, en entrevista con Efe, que México necesita una cuarta transformación, pero una “real”.
“Sí es necesaria una cuarta transformación pero no creo que la cuarta transformación es la que estemos realizando y creo que la Revolución, sin duda, hay que superarla”, indicó Illades, profesor del Departamento de Humanidades de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).
El académico expuso que una de las etapas de la Revolución que más le gusta a López Obrador es la de Madero, el personaje al que más se refiere.
“López Obrador cada que puede hace símil entre su administración y la de Madero especialmente con el acoso de la prensa”, recordó Illades, autor de Vuelta a la izquierda. La cuarta transformación en México, libro publicado este año.
EXCESIVA NOSTALGIA
La Revolución representó un modelo que permitió a México “transitar de manera relativamente exitosa por el siglo XX”, reconoció Illades.
Pero el profesor insistió en que ahora el país necesita una transformación “real, profunda, con más democracia, igualdad y derechos”.
En la óptica del historiador, los mexicanos todavía ven la Revolución y la historia mexicana de manera romántica.
Además, dijo que la administración de López Obrador en particular “ha hecho mucho énfasis en la historia patria”.
“La Revolución Mexicana ya cumplió su función y habría que pensar en otra cosa, pero otra cosa no es nada más decir: haremos la cuarta transformación, sino realmente hacer una transformación sustantiva de lo que es el modelo del Estado mexicano”, opinó.