El exsecretario mexicano de Defensa Salvador Cienfuegos, detenido en Estados Unidos y acusado de narcotráfico y blanqueo de dinero, se declaró este jueves no culpable de esos cargos durante una audiencia telemática en un tribunal federal en Nueva York, donde será juzgado.
La Fiscalía federal para el Distrito Este de Nueva York, que presentó los cargos contra quien fuera secretario de Defensa durante el Gobierno de Enrique Peña Nieto (2012-2018), informó además que la próxima audiencia fue fijada para el 18 de noviembre cuando Cienfuegos comparecerá por primera vez ante la juez Carol Amon, que presidirá su juicio.
Cienfuegos, que podría comparecer en persona a su próxima cita a la corte -que han estado cerrada varios meses por la covid-19-, fue trasladado el pasado 2 de noviembre desde la ciudad de Los Ángeles (California) después de que un juez negara concederle la libertad bajo fianza tras haber sido arrestado al llegar a esta ciudad.
El mexicano fue detenido el 15 de octubre de este año en el aeropuerto de Los Ángeles, acusado por la Fiscalía federal de Nueva York, en el condado de Brooklyn -donde también se juzgó al capo mexicano Joaquín “el Chapo” Guzmán-, de narcotráfico y blanqueo de dinero, y que reclamó su traslado para continuar el proceso legal.
El general en retiro se declaró no culpable a través de su abogado Ed Siapone en la corta audiencia virtual para volver a leerle los cargos porque fue trasladado de jurisdicción, que se realizó luego de que fuera suspendida previamente hoy por problemas técnicos.
El juez que leyó los cargos al mexicano sugirió que los 70 días que tiene la Fiscalía para iniciar un juicio comiencen a partir del 18 de noviembre. Hasta ese día, su abogado aprovechará para reunirse con la Fiscalía y revisar las pruebas que tiene contra su cliente
Los delitos, según la acusación, se cometieron entre 2015 a 2017, cuando Cienfuegos estaba al frente de la Secretaría de la Defensa Nacional de México.
La acusación del Gobierno de EE.UU. contra el militar retirado afirman que está implicado en la producción, tráfico y distribución de 1.000 kilogramos de marihuana, 500 gramos o más de metanfetamina, 5 kilogramos o más de cocaína y 1 kilogramo de heroína.
Cienfuegos era considerado uno de los militares más reputados de las Fuerzas Armadas y muy estimado entre la tropa, una carrera empañada por la masacre de Ayotzinapa y, ahora, por su detención a petición de la Agencia Antidrogas Estadounidense (DEA, en sus siglas en inglés).