A solo unos minutos de la capital queretana, el municipio de Corregidora se ha consolidado como un destino turístico imperdible en el centro del país. Su riqueza histórica, paisajes naturales y oferta gastronómica lo convierten en un lugar ideal para el descanso de fin de semana o para una experiencia más profunda de cultura y tradición.
El emblema indiscutible de Corregidora es la Pirámide de El Pueblito, también conocida como la Gran Pirámide de El Cerrito. Este vestigio prehispánico, uno de los más importantes del Bajío, es testimonio de la cultura tolteca-chichimeca que habitó la región. Recorrer su explanada, el templo y su museo de sitio permite al visitante hacer un viaje por más de mil años de historia.
Pero Corregidora no solo vive de su pasado. Hoy, el municipio ofrece una gran variedad de experiencias que combinan naturaleza, cultura y modernidad. En su zona urbana se encuentran cafés de autor, restaurantes con cocina regional e internacional, y centros comerciales que conviven armónicamente con templos históricos como el Santuario de la Virgen del Pueblito, uno de los más visitados en el estado, especialmente durante Semana Santa y el Día de la Virgen, cada 8 de septiembre.
Para los amantes de la naturaleza y el deporte, Corregidora cuenta con rutas ciclistas y senderos ideales para recorrer el Cañón del Batán, un pulmón natural que ofrece espectaculares vistas, áreas de camping y actividades como rappel o caminatas guiadas.
En cuanto a festividades, destaca la tradicional Fiesta del Gallo, una celebración popular llena de color, música, danzas tradicionales y rituales que se han transmitido de generación en generación. Además, el municipio ha apostado por la promoción del arte urbano y la cultura viva, con festivales de muralismo, cine al aire libre y conciertos.
El crecimiento ordenado de Corregidora ha permitido conservar su identidad al tiempo que se proyecta hacia el futuro como un polo turístico y económico estratégico en el estado. Su conectividad con Querétaro capital, la calidez de su gente y su ambiente seguro lo convierten en una excelente opción tanto para turistas nacionales como extranjeros.
Corregidora es, sin duda, un punto de encuentro entre la raíz indígena, la tradición católica y el dinamismo contemporáneo. Un municipio que invita a ser descubierto con todos los sentidos.