El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, confió este sábado en que “ya va a pasar la pandemia” pese a un repunte de contagios en el país, que acumula casi 105 mil muertes y cerca de 1 millón 90 mil casos de COVID-19.
“Ya va a pasar esta pandemia, vamos a regresar a la normalidad plena, que ese es el propósito, pero desde que estamos enfrentando esta pandemia decidimos con cuidado seguir recorriendo el país”, manifestó el mandatario en una visita a San Quintín, Baja California, en el noroeste de México.
Las declaraciones de López Obrador ocurren un día después de que México añadiera más de 12 mil casos de COVID-19 en un día, la tercera vez en la semana que supera los 10 mil nuevos contagios.
Estas son las cifras diarias más altas salvo por el 5 de octubre, cuando la Secretaría de Salud contabilizó 28 mil 115 nuevos contagios, aunque entonces lo atribuyó a una nueva metodología que incluye infecciones rezagadas.
La Secretaría también advirtió de repuntes de contagios en ocho de los 32 estados del país encabezados por Ciudad de México, que presenta un aumento semanal de 34 por ciento en el número de casos estimados.
Aun así, López Obrador defendió la gestión de la pandemia en México, que ocupa el cuarto lugar en muertes y el undécimo en contagios absolutos por el nuevo coronavirus.
Estamos aquí para comentar que vamos hacia delante enfrentando esta crisis doble, la crisis sanitaria y la crisis económica, y vamos avanzando en la transformación, con todos los obstáculos, con todas las resistencias, con las reacciones en contra de los conservadores".
Andrés Manuel López Obrador
El presidente, quien ha cuestionado la eficacia del cubrebocas y ha rechazado políticas obligatorias para controlar el brote, lamentó las medidas que tiene que tomar durante sus giras.
“Es muy extraño y muy molesto el que no podamos acercarnos, el que no podamos saludarnos de mano, el que no podamos abrazarnos, pero tenemos también que guardar la sana distancia y cuidarnos”, reconoció.
El mandatario realiza desde el viernes una gira por los seis municipios de Baja California, donde decretó la extensión hasta 2024 de los beneficios fiscales en las localidades de los 3.000 kilómetros de la frontera con Estados Unidos.
El Gobierno de López Obrador decretó en enero de 2019 la reducción del IVA del 16 por ciento al 8 por ciento en la frontera norte y del ISR del 30 por ciento al 20 por ciento, además de doblar el salario mínimo y bajar el precio de las gasolinas para homologarlo con el de Estados Unidos.